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"Nunca amanecimos", aseguran los habitantes de Villa La Angostura, Bariloche y San Martín de los Andes.
A raíz de la sorpresiva erupción del volcán chileno Calbuco, inactivo desde hace 43 años y con 2.015 metros de altitud, sucedida durante la noche de ayer, gran parte de la Patagonia argentina se encuentra sumergida en la más absoluta oscuridad. Refugiados en sus hogares, los habitantes de esta región se protegen de las cenizas volcánicas mediante barbijos y máscaras de oxígeno; respirar, abrir los ojos y ver resulta cada vez más complicado.
"Miro para afuera y no se ve nada. Parece que fueran las 4 de la mañana y son las 10 AM. La ceniza parece polvo, harina. Es bien finita y se te mete por los ojos, orejas y boca. En este momento no se ve nada, solo las luces de las calles. Es como si no hubiese amanecido", señaló un vecino, evidentemente consternado.
Los expertos afirman que el fenómeno natural no embiste mayor gravedad, aunque los recaudos y el temor crecen a cada instante. Las clases en los colegios, así como los vuelos y el tránsito en las rutas están suspendidos, dada la nula visibilidad imperante.
El Calbuco es uno de los tres volcanes más poderosos, de los 90 activos en Chile; su última erupción fie registrada en 1972. Las autoridades chilenas aseguran que, pese al amplio equipamiento técnico con el que se cuenta, es imposible predecir este tipo de fenómenos.
Fuente: Infobae
Imagen: Shutterstock
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